Una de las preguntas más frecuentes dentro del ámbito de la impresión en 3D consiste en descubrir si se puede conseguir crear e imprimir una imagen 3D a partir de una foto normal y corriente.
Los expertos en 3D tienen una respuesta rápida y sencilla a esa pregunta: sí. Se trata de un proceso fácil para aquellas personas que conocen a fondo la tecnología empleada en su proceso.
En este post tratamos un tema muy interesante en la actualidad para todas las personas interesadas en el sector del 3D: la creación de imágenes en 3D a partir de fotos gracias a las impresoras 3D.
Imágenes con un grosor algo mayor que el resto de fotografías y que, además, se puede quedar de pie sola. Aqui te dejamos los mejores consejos para imprimir 3D
Las impresoras 3D permiten crear e imprimir todo tipo de objetos y piezas en 3D. Aunque la impresión de imágenes en 3D es menos habitual que el resto de impresiones, también se puede conseguir gracias a este tipo de impresoras.
Para conseguir llevar a cabo este proceso obteniendo un resultado exitoso, se necesita una impresora 3D y un software específico que permita transformar una foto en 2D en un modelo listo para ser impreso en 3D. En el caso de no poder contar con una impresora 3D, se puede recurrir a los servicios de impresión 3D. Solo hay que enviar el archivo para imprimir y ellos se encargan del resto.
Tener disponible un microcontrolador, como puede ser Arduino, y luces LED RGB permite realizar y personalizar proyectos con distintos colores y efectos, aunque no es imprescindible.
¿En qué consiste la impresión de una imagen 3D a partir de una foto?
La impresión de una imagen en 3D a partir de una foto consiste en un proceso por el cual se obtiene una reproducción idéntica a la imagen convencional, que cuenta con dos dimensiones, pero esta vez en tres dimensiones. La foto original cuenta con ancho y alto, mientras que la nueva foto en 3D cuenta con ancho, alto y, además, fondo.
A la técnica de obtener relieve en las fotos se le denomina litofanía. El fenómeno de la litofanía consiste, básicamente, en la proyección de una luz a través de una lámina semitransparente en la que se ha moldeado un volumen.
Es decir, es el moldeado o grabado de una ilustración sobre una lámina traslúcida. Las zonas más oscuras de la foto se traducen como tramos más gruesos, mientras que las zonas más claras se ven más delgadas en la lámina obtenida. Esto genera un efecto de sombras al ver la imagen a través de la lámina.
Aunque la litofanía se utilizaba ya hace años, gracias a los avances en tecnología y a la aparición de las impresoras 3D, ha adquirido una nueva dimensión, nunca mejor dicho.
Los resultados que se pueden llegar a obtener gracias a las litofanías o fotos en relieve son sorprendentes. Se puede jugar con la mayor o menor opacidad de las diferentes capas que poseen para conseguir crear bonitos efectos, gracias a la luz que pasa a través de ellas.
¿Cómo se lleva a cabo la impresión de una imagen 3D a partir de una foto?
Aunque al principio puede parecer un proceso muy complicado, no lo es en absoluto. Crear una imagen en 3D partiendo de una simple foto convencional es realmente sencillo.
Un factor muy importante que no pasa por alto es la propia creatividad de quien realiza el proceso. Los resultados que se obtienen dependen del gusto por hacer cosas más sencillas o el reto de buscar espectaculares diseños con los que dejar con la boca abierta a todo el mundo.
A continuación, explicamos detalladamente todos los pasos que hay que seguir para llevar a cabo una impresión 3D y obtener los mejores resultados:
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Seleccionar una imagen y hacer los ajustes necesarios
El primer paso para conseguir una imagen en 3D a partir de una fotografía es elegir una foto con una resolución lo más alta posible. Para ello, es suficiente con tomar una buena fotografía con una cámara, que esté bien enfocada y con buenas condiciones de luz.
Hay que evitar a toda costa las fotografías comprimidas que se suelen enviar por redes sociales y programas de mensajería, ya que su resolución deja bastante que desear.
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Subir la imagen
Existen distintas aplicaciones con las que se puede llevar a cabo la transformación de una imagen convencional en una imagen en 3D. Lo más importante es utilizar una cuyo funcionamiento se adecúe a las necesidades de cada usuario.
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Editar la imagen utilizando un software de edición
Una vez cargada la imagen, es necesario hacer algunos ajustes para asegurarse de tener un modelo adecuado.
Lo único que hay que hacer el utilizar un filtro que transforme la fotografía en color a blanco y negro. Después hacer los ajustes de luz y contraste para que se diferencien bien todos los detalles.
También es interesante ponerle un marco alrededor de la imagen para que resalte la figura.
Este paso sirve para hacerse una idea de cómo quedará la impresión en 3D. No es el resultado exacto que se obtiene, pero sí una aproximación.
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Elegir la forma y descargar
El último paso antes de imprimir la imagen, es seleccionar el tipo de litofanía que se desea obtener: plana, curva, cilíndrica, etc.
Se puede probar con todas las opciones disponibles hasta dar con la que más se asemeja a la idea principal que se tiene de la imagen en 3D.
Una vez elegido el modelo, hay que descargarlo en formato .stl.
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Pasar de .stl a .gcode
Para poder imprimir el modelo de imagen creado, primero hay que transformarlo a un formato compatible con las impresionar 3D.
Existen varios programas que permiten realizar esta transformación. La mejor opción es elegir uno que tenga un funcionamiento sencillo.
También es recomendable imprimir a una velocidad baja para obtener un buen acabado. Si la impresión va demasiado rápido puede perder calidad.
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Crear el modelo de impresión 3D
Se puede utilizar el programa CURA 3D o webs como Con CURA 3D para crear el modelo 3D de impresión directamente a partir de una imagen JPG o PNG, ya que también puede trabajar con estos formatos y convertirlos en archivos STL.
Si se sube la imagen a 3DPRocks, también se puede obtener fácilmente el archivo de impresión .stl.
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Imprimir el archivo 3D
El último paso es la impresión del archivo 3D. Antes de imprimir hay que hacer los ajustes necesarios para ello.
En el caso de que no se pueda acceder a una impresora 3D, se puede recurrir a un buen servicio de impresión 3D. Simplemente hay que enviar el archivo de impresión STL y ellos se encargan de imprimir y dar el mejor resultado.
¿Qué se puede hacer con una imagen 3D a partir de una foto?
Los usos de una imagen 3D a partir de una foto son muchos y muy variados. Dependen, exclusivamente, de los gustos y las preferencias de los usuarios.
Pero, por si quieres alguna que otra idea innovadora con la que dejar asombrados a todos tus amigos, te dejamos algunas opciones:
Pegar todas las fotos 3D a la pared y poner una bombilla
Las fotografías de tres dimensiones necesitan una luz en la parte trasera para poder verse correctamente.
Puedes crear un marco en la foto con algún software de diseño 3D e introducir una pequeña bombilla en su interior. El resultado será asombroso y de lo más original.
Personalizar una taza con una imagen 3D
Una de las opciones que ofrecen los programas de diseño 3D permite generar un cilindro con la imagen impresa en litografía. Solo habría que añadirle una base y un agarrador para conseguir la mejor taza personalizada de la historia.
Personalizar cojines y almohadas con diseños 3D
Aunque puede parecer una locura, con la impresión 3D también puedes conseguir un cojín o una almohada con tus diseños favoritos. Aprovecha la forma del cojín o la almohada e imprímelo en filamento flexible.
El único inconveniente es el elevado precio del filamento flexible. Pero vaya, la idea es muy buena.
¿Qué formato necesito para imprimir en 3D?
Si quieres imprimir una imagen en 3D, se tiene que hacer en formato STL.
¿Qué es un archivo STL?
Un archivo STL (Stereolithography) es un tipo de archivo utilizado en la impresión 3D para describir la geometría tridimensional de un objeto. Cuando se almacena la información en archivo STL, funciona para representar la superficie externa de un objeto en forma de triángulos, lo que lo convierte en una representación simple y eficiente de la geometría tridimensional.
¿Cómo convertir un archivo en STL?
Para convertir tu imagen a 3D en archivo STL dependerá mucho del programa qué utilices, sin embargo, esta es la instrucción general:
- Seleccione Archivo
- Guardar como.
- Archivo STL.
- Guardar
En algunos casos podrá solicitar la medida o pulgadas exactas, y en otros casos la exportación tendrá que hacerse en binario.
Ahora que ya conoces paso a paso el proceso para crear una imagen 3D a partir de una foto y algunos de los usos que puedes darle, es hora de poner tu impresora 3D en marcha, dejar votar tu imaginación e imprimir todo lo que desees.
Una imagen 3D a partir de una foto se convertirá en el regalo favorito de cualquier persona y todos tus amigos te pedirán una para ellos.
En Dynapro disponemos de impresora 3d gran formato para poder cubrir cualquier necesidad que tenga un cliente.
