Si quieres saber con qué materiales trabaja la impresora 3D, te recomendamos que leas este artículo donde explicamos detalladamente en qué consiste una impresora 3D y qué ventajas tiene, cuáles son estos materiales con los que trabaja más habitualmente y cuáles son los tipos de filamentos más comunes. 

Uno de los aspectos más importantes que debemos tener en cuenta es con qué materiales trabaja la impresora 3D para sólidos que queremos comprar. En función de la industria o el negocio en el que trabajemos, los materiales de la impresora 3D podrán variar, ya que cada uno cuenta con unas propiedades específicas y diferenciadas, que determinarán la apariencia final del sólido impreso.

¿Qué es una impresora 3D y para qué sirve?

Una impresora 3D es un dispositivo capaz de imprimir prácticamente todo tipo de figuras con volumen a partir de un diseño hecho por ordenador. Con volumen nos referimos a que tiene ancho, largo y alto. 

Una de sus funciones principales consiste en producir un diseño 3D creado con el ordenador en un modelo 3D físico, es decir, real. 

A modo de resumen podemos decir que una impresora 3D permite crear una figura real a través de un diseño creado en el ordenador y gracias a cualquier programa CAD (Diseño Asistido por Computador) y una impresora 3D. 

Se puede imprimir en 3D prácticamente cualquier objeto que queramos crear. Desde pequeños y sencillos objetos hasta grandes partes de un barco o avión e, incluso, órganos humanos plenamente funcionales. 

En definitiva, el futuro que nos espera con las impresoras 3D es increíblemente abrumador. Las impresoras en 3 dimensiones se han convertido en una auténtica revolución tecnológica en todos los sectores de la actualidad. 

Beneficios de la impresora 3D

Las actuales impresoras 3D cuentan con una amplia lista de ventajas y beneficios, que justifican su imparable éxito. Algunos de los más destacables son los siguientes:

  • Versatilidad
  • Inmediatez
  • Flexibilidad
  • Reducción de costes
  • Personalización
  • Nuevo mercado
  • Margen de mejora
  • Alta calidad 

Con qué materiales trabaja la impresora 3D

Seguro que más de una vez te ha asaltado la duda sobre con qué materiales trabaja la impresora 3D. Si quieres darle una respuesta clara y sencilla a esta pregunta, sigue leyendo un poco más. 

La mayoría de las impresoras 3D utilizan un filamento de material termoplástico, el cual sale derretido del extrusor durante la impresión y después se va endureciendo a medida que se va enfriando. Los materiales termoplásticos más comunes y populares son los ABS y los PLA. 

Material ABS

El filamento ABS es el plástico más común en la impresión 3D. Algunos de sus usos más comunes son en la carrocería de automóviles, fundas de teléfonos móviles o electrodomésticos. 

Una de las características que destacan de este material es que en estado sólido, es muy duro y resistente. Sin embargo, también se pueden encontrar en forma de polvo para procesos de lecho de polvo como SLS y en forma de líquido para las tecnologías SLA y PolyJet. 

El ABS es un plástico capaz de resistir altas temperaturas, por lo que se utiliza, específicamente, en impresoras capaces de alcanzar elevadas temperaturas. Debe alcanzar temperaturas entre 230ºC y 260ºC.

Es un material resistente, capaz de soportar temperaturas de -20ºC hasta 80ºC. Además de su alta resistencia, es un material reutilizable y se puede soldar gracias a procesos químicos. 

Sin embargo, el ABS no es un material biodegradable y se contrae en contacto con el aire, por lo que la plataforma de impresión debe calentarse para evitar posibles malformaciones. 

Además se recomienda utilizar una impresora 3D de cámara cerrada para limitar las emisiones de partículas al imprimir con el material ABS.

Material PLA

El material PLA, también conocido como ácido poliláctico, es un termoplástico de origen natural, con características excelentes y de calidad. La impresión llevada a cabo con este material es mucho más rápida, aunque en estado sólido no presenta mucha resistencia. 

Una de las principales ventajas de este material es que es biodegradable. Además, se fabrica con materias primas renovables como el almidón de maíz. 

Es uno de los materiales más sencillos de imprimir, aunque tiende a reducirse ligeramente después de la impresión 3D. 

A diferencia del material ABS, el PLA no necesita una plataforma con calefacción al imprimirse y su temperatura de impresión es entre 190ºC y 230ºC. 

Dos de sus características más reseñables son su alta velocidad de enfriamiento y de solidificación, que dificultan su manipulación. También es importante mencionar que puede deteriorarse al entrar en contacto con el agua, aunque es consistente y fácil de usar. 

Por último, algunos de sus usos más comunes son en suturas médicas e implantes quirúrgicos, pues posee la capacidad de degradarse en ácido láctico inofensivo presente en el cuerpo humano. Los clavos, tornillos, varillas o mallas implantados quirúrgicamente en el cuerpo, solamente tardan entre 6 meses y 2 años en descomponerse. 

También se utiliza en embalajes de alimentos, bolsas, vajillas reciclables, prendas desechables o productos de higiene. Por lo tanto, podemos decir que el PLA es un material muy seguro. 

En la actualidad, el PLA se ha convertido en la opción más popular dentro de la impresión 3D, debido a su baja toxicidad y su gran respeto por el medio ambiente y la naturaleza. 

Estas dos opciones son la respuesta ideal a la pregunta con qué materiales trabaja la impresora 3D. Por lo general, los filamentos 3D utilizados por las impresoras 3D más profesionales suelen costar alrededor de 25-30€. Vienen en bobinas de 1 kilogramo de media. Los filamentos especiales pueden llegar hasta a cuadruplicar este precio. 

Sin embargo, tenemos que decir que existen otros filamentos, además del plástico, los cuáles permiten obtener prototipos con otras características especiales u otras texturas más flexibles. 

Entre los filamentos más actuales y modernos encontramos estos 2:

  • Filamento Laybrick. Es una mezcla de plástico con yeso. Es ideal para impresoras de gran tamaño. Su utilización no requiere cama caliente y su temperatura de impresión varía entre los 165ºC y los 190ºC, aunque dispone de un ventilador para los casos en los que la temperatura se exceda de los 210ºC. 
  • Filamento Laywood-D3. Es una mezcla de plástico con madera. Recrea un acabado de la superficie y la textura similar a la de la madera, que se puede pintar y lijar. 

¿Son caros los materiales para trabajar en impresoras 3D?

Sus precios pueden ir variando en temas como la marca, cantidad y hasta en la calidad del producto. Ahora bien, también, puede variar según el tipo de impresora y la calidad que se busca en el resultado final. Algunos materiales, como el PLA (ácido poliláctico), tienden a ser más asequibles en comparación con otros, como el ABS (acrilonitrilo butadieno estireno) o el nylon.

Conclusión sobre con qué materiales son capaces de trabajar las impresoras 3D

A modo de conclusión final, podemos decir sobre con qué materiales trabaja la impresión 3D, que estos son tan diversos como los productos resultantes de los procesos de impresión 3D. Como tal, la impresión 3D es lo suficientemente flexible como para permitir a los creadores seleccionar y determinar la forma, la resistencia y la textura que tendrá cada producto. 

Lo mejor de todo es que la impresión 3D permite que estas cualidades puedan conseguirse con menos pasos y de forma más rápida que si utilizamos métodos tradicionales de impresión y producción. Además, estos productos pueden fabricarse con varios tipos de materiales de impresión 3D. 

Para que la impresión 3D se realice en forma de producto terminado, primero se debe enviar una imagen súper detallada del diseño en cuestión a la impresora. Los detalles, por lo general, se presentan en formato STL, es decir, mediante triángulos estándar que transmiten las complejidades y dimensiones del diseño.